Lo único que tengo claro es que llover, lo que se dice llover, ufff, va a ser bíblico lo que va a caer.
Y nos dieron las diez - Joaquín Sabina y Rocío Durcal (Video YouTube)
(trompetas)
Fue en un pueblo con mar,
una noche después de un concierto;
tú reinabas detrás de la barra
del único bar que vimos abierto
Fue en un pueblo con mar,
una noche después de un concierto;
tú reinabas detrás de la barra
del único bar que vimos abierto
-”Cántame una canción
al oído y te pongo un cubata”-
-”Con una condición:
que me dejes abierto el balcón de tus ojos de gata”-
loco por conocer
los secretos de mi dormitorio
esa noche canté
al piano del amanecer todo mi repertorio.
Los clientes del bar
uno a uno se fueron marchando,
tú saliste a cerrar,
yo me dije:
“Cuidado, chaval, te estas enamorando”,
(trompetas)
(trompetas)
luego todo pasó de repente,
mi dedo en tu espalda
dibujó un corazón
y mi mano le correspondió debajo de tu falda;
caminito al hostal
nos besamos en cada farola,
era un pueblo con mar,
yo quería dormir contigo y tú no querías dormir sola…
Y nos dieron las diez y las once, las doce y la una
y las dos y las tres
y desnudos al amanecer nos encontró la luna.
(trompetas)
(trompetas)
Nos dijimos adiós,
ojalá que volvamos a vernos
el verano acabó
el otoño duró lo que tarda en llegar el invierno,
y a tu pueblo el azar
otra vez el verano siguiente
me llevó, y al final
del concierto me puse a buscar tu cara entre la gente,
y no halle quien de ti me dijera
ni media palabra,
ni media palabra,
parecía como si
nos quisiera gastar el destino una broma macabra.
No había nadie detrás
de la barra del otro verano.
Y en lugar de tu bar
me encontré una sucursal del Banco Hispano Americano,
tu memoria vengué
a pedradas contra los cristales,
-”Se que no lo soñé”-
protestaba mientras me esposaban los municipales
en mi declaración
alegué que llevaba tres copas
y empecé esta canción
en el cuarto donde aquella vez te quitaba la ropa
Y nos dieron las diez y las once, las doce y la una
y las dos y las tres
y desnudos al anochecer nos encontró la luna.
Y nos dieron las diez y las once, las doce y la una
y las dos y las tres
y desnudos al anochecer nos encontró la luna.
(trompetas)
Aunque bien pensado, yo prefiero algo como esto (Video YouTube)
Y recuerda que la vida puede ser maravillosa.
Adiosito vecinit@.
El cuarto mono te enseña, el cuarto mono entretiene y yo te digo contento, hasta el post que viene